Surrealismo
En 1924 aparece en París, de la pluma del escritor André Breton, el “Manifeste du Surrealismo”. Fue con este texto que nació el surrealismo, un movimiento artístico que enlazaba con el movimiento dadaísta, por su ruptura con la tradición, pero que a la vez se separaba de él por la confianza en las posibilidades expresivas del arte.
LAS RAÍCES DEL SURREALISMO
El surrealismo tiene unas raíces profundas que lo conectan con el romanticismo visionario y fantástico, filtrado a través de las experiencias del simbolismo y el dadaísmo. Los descubrimientos en el campo de la biología, y sobretodo de la psicología, son el punto de partida para el reconocimiento de las formas de expresión del surrealismo. El mismo Breton lo reconoció en el homenaje que hizo al padre de la psicología, Sigmund Freud. Siguiendo la pauta de las afirmaciones científicas, se admite como verdadera y autentica la expresión de lo que escondemos en las profundidades de nuestra mente, un contenido de los lenguajes tradicionales que se esconde bajo reglas e imposiciones, pero que podemos emerger a través de los sueños, la fantasía y el inconsciente.
LOS PRIMEROS SURREALISTAS
Los primeros surrealista son Picabia, Man Ray, Arp y Duchamp, pero el movimiento alterna fases de vitalidad y de calma, principalmente a causa de las discrepancias respecto a la consideración que algunos atribuían al significado político del arte. Klee y Picasso se sintieron cercanos al movimiento durante un tiempo. Pero para entender mejor las características tenemos que hablar de muchos otros pintores.
OTROS SURREALISTAS
El alemán Marx Ernst (1891-1976) fue uno de los primeros en abrazar el movimiento. Una de las maneras de afirmar la espontaneidad expresiva se basaba en la técnica del frottage, que consiste en obtener una imagen en un papel o tela colocados sobre una superficie en relieve fregando con un lápiz blando. La sensibilidad de Joan Miró (1893-1983) es muy distinta. El catalán expresa una visión de fabula, fantasiosa y ligera, a través de las formas filiformes e inquietas, animalitos mecánicos y microorganismos de grandes ojos y de colores vivos y encendidos. El belga René Magritte (1898-1968), se incorpora al movimiento más tarde eligiendo asociaciones aparentemente ilógicas entre formas y objetos cotidianos para afirmar una visión de amarga ironía. Con imágenes y composiciones simples Magritte anula el mundo cotidiano lógico.Salvador Dalí (1904-1989) es otro de los pintores surrealistas importantes. Da una visión personal del movimiento. En Dalí todo es obsesivo con imágenes de un realismo que representa las alucinaciones. También son surrealistas las esculturas del suizo Alberto Giacometti.
hrubiales
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